El parvovirus canino 2 (CPV-2) es una amenaza importante para la salud del perro, especialmente para los cachorros. Desde el primer aislamiento del virus, el virus ha ido evolucionando y se han identificado diferentes variantes llamadas CPV-2a, CPV-2b y CPV-2c que han ido desplazando progresivamente la variante original CPV-2. La mayoría de las vacunas comercialmente disponibles están formuladas con la variante original CPV-2. Estudios previos experimentales han demostrado que la respuesta inmune generada mediante vacunación puede tener reactividad cruzada y generar protección entre variantes [1]. 

A pesar de esto, la circulación de distintas variantes genera preocupación entre la comunidad veterinaria. El presente estudio pretende resolver estas dudas midiendo si las vacunas de CPV-2 son capaces de generar una respuesta inmune protectora frente las diferentes variantes descritas del virus.